Los caminos
suburbanos de aguas podridas
perros con
sarna y basura
deshechos
casi sin nombre
con mirada
de temporal y desolación
que hay una
cierta desesperanza
un aspecto
profético de lenguaje duro
porque la
poesía huele a mierda
y no es
buena para los libros
la vida que
se cuenta en números
va a parar a
otro lugar
que no vas a
soportar cinco minutos
de la putos
versos recién paridos
de tres días
de lluvia seguidos entre el barro
el frío el
hambre
ni corazón
que llore tanto
ni pañuelos
que contengan
en tan pocas
palabras
las miradas
esos ojos esas sangres
¡Elí, Elí! ¿lemá
sabactaní?