lunes, 25 de febrero de 2013

UN PÁJARO EN LA SOLAPA


Y bien, por aquí seguiremos
por estas sendas perdidas
con el orgullo de llevar signos y símbolos idolátricos
en la ropa en los zapatos en la cara
en cada lugar donde pisas o no pisas
con quién te juntas o desprecias sin embargo
la luna sigue allí con alguna pedrada más
y algún enamorado menos
las leyes están para justificar romperlas impunemente
a favor de la alegría particular y el llanto universal
¡qué lástima! tan pocas risas verdaderas,
Francisca vuelve a casa
la trae un viento lleno de discursos baratos para oídos sordos
las manos suenan como lluvia loca o como aplausos vacíos
Santiago está desaparecido
y las mujeres de los calendarios cada vez tienen mas plástico
los niños bucean en sus sueños inyectables para ser hombres
jamás irán a los balnearios ricos y yo tampoco
Napoleón alguna vez se bajó de su caballo y pensó en Catalina,
yo bajé del bus y pensé en qué comer
pero no es lo mismo aunque creo que soy un tipo más alto
y él crea que es más grande:
ambos estamos jodidos,
yo por pobre y el por muerto,
de todos modos la historia no es neutral:
a cada uno lo suyo.
La discriminación tiene la cara de un hipócrita:
se arrima donde el sol mas calienta.
Cecilia abortó.
El tiempo te atraviesa las células
la planta empaquetadora del aparato de Golgi
la Mesopotamia argentina
y también por detrás de la galaxia Abell 2218
y en eso no tengo diferencias ni dudas con Shakespeare
con el que concordamos además en saber escribir y leer
lo que nos hace algo parecidos.
Yo no hablo mucho inglés y él no hablaba español,
lo que nos hace algo diferentes.
La diferencia entre dos puntos es mucha o poca,
puede ser una lluvia de martillos para cabezas de clavos
que es un pedazo considerable de historia
o la resta entre la sinfónica de Viena
y la banda de estúpidos musicales de la esquina de mi casa,
de todos modos
por ahí andan los niños de mamá de estos tiempos
sin la mamá, claro está,
niños pequeños y niños viejos
parece que no saben cuándo parar,
la tolerancia está en entredicho.
El vecino mató a su esposa esta tarde
va siendo tiempo de otoño en el aire
no sé si son pájaros o rezos los que cruzan,
la vida puede ser un poco larga
así que no cierres los ojos y aguanta
las calles están salpicadas de cuestiones sin sentido
los jardines están descuidados
y hay más malas hierbas en los corazones
de modo que por ahí seguiremos
faltan más santos y sobran muchos sacerdocios,
siguen habiendo muchos desaparecidos en todos lados,
probablemente es seguro que sin conocernos
de tan asqueados y diferentes
de tan espoleados y perseguidos
nos encontraremos:
yo llevaré un pájaro en la solapa.


Xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
 DERECHOS RESERVADOS

martes, 12 de febrero de 2013

ESTA BLANCA TEMPESTAD DE ARENA


Y ahora mírame y contesta viéndome a la cara
 qué calienta tu sangre, te rebela,
te hace aullar feroces gritos de desgarro
y sacando los ojos de tu ombligo
advierte las cosas a tu alrededor.
Porque estos orificios cansados de mundo por los que observo,
me dicen que el dolor de cualquier hombre
no es mucho menos que el amor de una mujer
y su hambre ni se compara con el aroma de su vientre
ni los calambres de la hambruna al olor a sexo vivo.
Entonces dime qué te conmueve, qué espina se te clava:
 inmensas muchedumbres parecen bosques
troncos semovientes que talan de diversos modos
y definen otras gentes los que ellas son
de maneras siempre nuevas e  insospechadas
convenientes, rentables, como enormes establos
para decir las cosas así tan fieramente:
esta esclavitud, idolatría signos de los tiempos,
porque no hay demasiado derecho a sonreír
salvo que estés loco, inconsciente o tonto,
salvo que no sepas qué cosa es el amor.
Uno debiera arrancarse los pelos de tan desesperado
como para no andar del brazo fácil de los atardeceres de locura fácil,
la engañifa de un momento apenas
de sudores corporales esporádicos y sin compromiso,
porque el amor por una mujer es otra cosa
porque el amor por lo próximo es otra cosa
porque el suplicio es permanente y multiplicado,
la barriga vacía es un largo concierto de carne que reclama
el amor de algo que masticar simplemente.
El silencio hermoso de las noches de luna
no se compara con el silencio de la amargura.
Es cierto:
ni calvo ni con dos pelucas andarás diciéndome.
Nuevamente vuelvo a inquirirte
porque es necesario amar en particular, claro está,
pero también desparramar excedentes generosos,
porque el amor es un misterio inagotable
hecho para dar no como una zaparrastrosa limosna
porque hay un tiempo para todo
y todo lo que tenemos es tiempo.
Porque de veras no se puede con la impresión espantosa
de esa bofetada que te repiquetea las mejillas
ver sonreír a diestra y siniestra
recorriendo en aeróstato la vida en un paneo de novela
como si no ocurriera nada o acaso
huyendo como un ciego hacia adelante
dando palos a tientas por no abrir los ojos.
Dime qué ves mas allá de tu ombligo que te haga reír
como si finalmente todo estuviese en paz
como si finalmente los besos campearan el orbe
como si finalmente ya no hay que poner cerrojos a las puertas
como si finalmente los niños no se murieran anónimos
como si finalmente los viejos sucumbieran en familia y plácidos
como si finalmente se oliera a cosa humana y tierna
y las mariposas, el aire, y la risa fuera patrimonio común
como si finalmente
como si
cómo
entonces dime viéndome a los ojos,
cómo andas ensimismado en tu miserable ombligo
o lo que es peor en esa barbarie secuencial de olvidos,
cómo andas así mirando sin ver
tal si fuesen deshechos para tu memoria
 esa sangre pasando a tu lado,
ese despilfarro de bolsa agujereada e inservible de palabras
que dices como para otorgarte la excusa y el perdón
tal si fuese tu lugar en el mundo ser el bueno de la película
con letras grandes de marquesinas entre los extras.
Es que para gozar uno debiera no sólo tener corazón
sino saber para qué sirve
porque parece un músculo involuntario
tan incontrolable que no sabes cuándo se parará
y ese es el drama, no te controlas,
dependes de un miserable pedacito de carne 
que te dirá basta cualquier día de estos
y mientras tanto te lo pierdes,
te pierdes el amor simplemente
en las paradas de los buses, de los trenes,
en las calles y en todos lados,
en las puertas de todas las casas
que son como un nuevo mundo
inclusive la tuya.
La felicidad es cosa seria si la encuentras,
no va disfrazada de amor ni lo parece,
es parte general de esta guerra donde se avanza
día a día
dolor a dolor
uno a uno
cuerpo a cuerpo
hombre a hombre.
Que es justo cuando descubres
que debes decidir de qué lado estarás,
que andar de farra con los lobos no es un buen negocio:
todas las manadas tienen sus alfas
y es despiadado el ejercicio del poder.
En cambio si es que acaso puedes, qué cosa linda de veras,
se descansa en los espacios de todos los colores
 es decir, se ama verdaderamente,
y uno puede echarse a dormir tranquilo
de noche
cuando puedes tener un sueño completo y pacífico.
La sonrisa llega al rostro a la hora justa
bondadosamente
y así se intuye y se recibe
o es una mueca convencional
que no agrega nada a tu cara de guasón sin Batman.
Pues bien, ahora mírame
y no me digas nada.
Deja el espectáculo de tu ombligo.
Si no te llegan pronto el delicado olor de los jazmines
así, sin ningún motivo que te conmueva las entrañas
no hay nada que hacer.
He blasfemado en tu cara mi evangelio
para dejar constancia de mi paso,
esta blanca tempestad de arena.

XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
DERECHOS RESERVADOS

BALACERA DE PALABRAS...BUSCÁ Y DISPARÁ UN CLICK EN ALGÚN LUGAR DE ESTE ESPACIO EN NEGRO