¿Qué se yo? dijo Montaigne
y lo escribió en la torre de su castillo.
El acostumbramiento y después el olvido
que el consuelo no apaga la sed del alma
está lleno de amputaciones y ausencias
dejar ir inconsolablemente doler el
duelo
porque todos los duelos me mueren
desdibujan los horizontes engañan
entre día y noche engañan
dan pulsiones de luz chisporroteos
chiquitos
pequeños granitos de mostaza haciendo
agujeros
pascuas y más pascuas
aprender a soltar
perpetuo peregrino
esa es la historia
digo yo.
DERECHOS RESERVADOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario